McYadra Sport detectó la necesidad de sintetizar en un porfolio todos los tejidos con los que podía trabajar para facilitar su presentación a potenciales clientes.
Para ello, anualmente se han realizado diferentes catálogos corporativos en los que, para facilitar pedidos posteriores, se han incluido muestras de tejidos en cada folleto, con sus referencias correspondientes. Por otro lado, para cuidar la imagen de la marca, se trabajó una caja contenedora, para aglutinar todo el material.